Reflexiones sobre la libertad
El otro día uno de vosotros me preguntó cómo definiría yo la libertad y hoy me he levantado con un par de ideas. Bitcoin vuelve por cierto en este post.
Algunas personas nos pasamos mucho tiempo hablando de la libertad por aquí y la libertad por allá y quizás haya filósofos que lo hayan tratado extensamente pero como yo leo poco sobre todo en los tiempos actuales (papá de peques) pues no conozco ese trabajo.
Sí que me he cuestionado por qué tanta gente habla de esto sin pararse a definirlo, así que hoy me apetecía hacer el esfuerzo de reflexionar sobre esto tras el reciente tweet y pregunta de uno de vosotros.
Aquí va mi tesis, que elaboraré a continuación:
La libertad es la irrefrenable y eterna necesidad de superar nuestros límites internos y externos, con el fin de progresar y ser felices
Muloko
Para mí el ser conscientes de nosotros mismos es lo que nos hace querernos y aspirar a más y esto nos ocurre exclusivamente a los humanos.
Pero aspirar a más implica ser conscientes también de que tenemos que, para ello, superar una serie de limitaciones:
Las impuestas por nuestro ADN y nuestros hábitos/sesgos, que nos hacen ser respectivamente más o menos vulnerables al entorno y a las opiniones de los demás, que a su vez tienen mayor o menor impacto según nuestra opinión de nosotros mismos (límites internos todos ellos)
Las impuestas por otras personas que pueden limitar nuestra capacidad para prosperar por la vía que sea, normalmente la violencia (límites externos)
Un animal (que yo sepa) no anhela ser libre porque no es consciente de sí mismo y por lo tanto no siente la necesidad de progresar; sencillamente vive en auto-pilot dejando que sus hormonas le hagan reaccionar a todo tipo de eventos en su entorno, en función de los dictados (algoritmos) escritos en sus genes. Sus genes mutarán con cierta frecuencia tratando de adaptarse mejor al cambiante entorno y cuando acierten sobrevivirán y cuando no, pues no.
Pero los humanos sí. Nosotros tenemos dos capas de adaptación, una la genética y otra la intelectual. La intelectual nos hace más libres e independientes de la genética y por eso sobrevivimos aunque genéticamente no fuese posible. Yo mismo tuve una operación de megauréter a los 7 años y no habría sobrevivido si alguien no hubiese conjeturado con posibles soluciones a este problema médico años antes.
En realidad me doy cuenta de que ya he hablado de este concepto de libertad cuando he hablado de la velocidad de escape, una para huir de nuestros límites externos y otra para los internos, respectivamente en los siguientes posts.
Límites internos
La velocidad de escape respecto a nuestras limitaciones internas no para de aumentar gracias al aprendizaje sobre la realidad, sobre los demás y sobre nosotros mismos, consecuencia a su vez de la aplicación del método científico, que es algo a lo que doy muchas vueltas en esta newsletter.
A base de generar conjeturas/explicaciones (como este post), tratamos de comprender la realidad un poco mejor y de, con las tecnologías que desarrollamos, superar la limitación que supondría vivir en Europa en invierno gracias a nuestro conocimiento del fuego o del abrigo o, el vivir en una estación espacial durante meses gracias a lo que aprendemos sobre la vida sin gravedad o con oxígeno limitado.
Límites externos
Respecto a las limitaciones externas, yo diría que hemos tenido varios tipos de respuesta:
La violencia
Las leyes
Bitcoin
- Primero empezamos usando exclusivamente violencia que, podríamos decir, es el recurso que nos queda cuando nuestro conocimiento no es suficiente como para solucionar un problema por nosotros mismos o a base de cooperar con otros. Por lo tanto según esto, la violencia es la consecuencia de no tener libertad total, es endémica y consustancial a nosotros.
- Después creamos las leyes que en aquellos casos en los que estuvieron bien formuladas en principio debieron reducir el uso de la violencia.
- Con Bitcoin creo que estamos ante una nueva fase en la que usaremos menos las dos anteriores.
A medida que los desarrollos tecnológicos nos vayan haciendo lo más parecido a lo que para nuestros ancestros hubiesen sido Dioses, será más rentable vivir la vida a nuestra bola que el aprovecharnos del prójimo con la violencia.
La libertad total no existe
Me parece interesante concluir que todo esto significaría que la libertad total no existe pues tenerla implicaría el conocimiento total de la realidad y, como ya he explicado muchas veces, esto no es posible, tan solo podemos aspirar a acercarnos.
La búsqueda de la libertad será por lo tanto una lucha eterna y, consecuentemente, la violencia nunca desaparecerá del todo.
No tiene sentido por este motivo, que las autoridades Chinas pidan a su población que frenen su anhelo de libertad. Es absurdo, es contra natura:
Ser ignorante según esto es ser esclavo, al igual que vivir preso de las opiniones de los demás. Conocer y aprender sobre tu entorno en primer lugar y aprender sobre tí mismo en segundo, nos liberan.
En realidad podrías decir que ser un poco más libre/soberano post a post, conjetura a conjetura, es lo que trato de hacer semana tras semana en esta newsletter.