Las fases humanas respecto a la escasez
Cazador-recolector, competidor y finalmente recolector otra vez
Adoro a mis hijos pero me dejan exhausto. Se pelean constantemente y diría que la inmensa mayor parte de las veces es o bien porque solo hay un cochecito azul (hay otro rojo pero no vale), porque solo hay una TV, porque uno ha comido más carne que el otro o bien porque uno estima que recibe más atención que otro.
Pero luego me entero a través de mi mujer de que algunos vecinos están con frecuencia encabronados unos con otros porque uno invita demasiada gente a la piscina comunitaria, otro reserva demasiadas horas en la cancha de padel, otro no quiere actividades en el césped, etc…
Pero es que es absurdo esperar lo contrario: Todos tenemos diferentes necesidades: unos vecinos tienen niños mayores, otros pequeños y otros no tienen niños. Algunos están en paro y otros se levantan pronto. Unos quieren que por lo tanto su hijo adolescente se quede hasta tarde en el patio de la urba mientras otro lo que quiere es dormirse pronto. Y finalmente alguno gana dinero dando clases de padel.
Como tenemos los mismos recursos para un montón de gente con necesidades diferentes, aparecen las reglas y con estas el estancamiento y dificultad para inventar e innovar.
Luego la lógica de este razonamiento es que la competencia por los recursos implica reglas y estas implican un estancamiento adicional.
La discusión es a todos los niveles
Lo mismo ocurre a nivel nacional. La extraordinaria energía que la gente destina a discutir sobre política no es más que la consecuencia de lo mismo: los recursos son escasos, ya sean la atención de tus padres, la comida en un momento dado, la TV o el dinero que tendré a fin de mes para satisfacer mis necesidades tras pagar mis impuestos.
Es mucho más fácil que discutir, delegar las decisiones y discusiones de retrasados que se peleen en el parlamento. Abusarán de su poder sobre tí y vivirán a tu costa pero a cambio no tendrás que preocuparte. Es un coste por el que mucha gente está dispuesta a pasar. Este es el asunto central, que el coste de ocuparse de las cosas es para muchos más alto que el de que abusen de tí y el motivo en mi opinión es que la evolución no nos ha diseñado para compartir y administrar recursos escasos.
Otra cosa es que ese coste de delegación esté aumentando significativamente y que cada vez haya menos competencia por los recursos a medida que aprendemos más.
Las fases
Nuevamente, no hemos sido diseñados para compartir recursos escasos: durante cientos de miles de años vivimos como cazadores-recolectores de lo que encontrábamos en la naturaleza. Había tanto y sobre todo éramos tan pocos, que no teníamos que partirnos la cara por ese motivo (por otros supongo que sí).
Tras la primera fase cazadora recolectora en la que los recursos eran mucho más de lo que necesitábamos, hemos entrado en una segunda desde el neolítico en la que tenemos que competir por estos. Pero desde que empezamos a aplicar el método científico, seguimos compitiendo pero cada vez menos gracias a que conseguimos aumentar nuestro conocimiento y con ello nuestro aprovechamiento de los recursos. Además con este conocimiento podemos muy poco a poco encontrar más recursos dentro y fuera de nuestro planeta.
Buena parte de la competencia por los recursos se da precisamente por el extraordinario coste que tiene el Estado para delegar precisamente la discusión sobre la asignación de esos recursos.
La tercera y siguiente fase será la que quizás Kurzweil (o Diamandis) tanto anuncian, la de la singularidad o la de la abundancia, recolectora nuevamente.
Hasta el tiempo de una vida humana poco a poco conseguiremos que sea cada vez menos escaso.
En definitiva