Conciliando narrativa vs incentivos
Quiero explorar en este post la idea de qué manda más, si la narrativa/relato o los incentivos en las personas y viene a cuento de una conversación que tuve en twitter una vez
Hace un tiempo en twitter Recuenco dijo algo sobre que el relato mandaba y yo debí responderle algo así como que no, que eran los incentivos. Pero me he dado cuenta de que no es tan fácil a la vista de cosas que veo que están pasando. Este post es un intento de llegar a alguna conclusión o, mejor dicho, de conciliar ambas visiones.
Es decir, por ejemplo, fíjate en la movida de las renovables cuya justificación es por una parte que son más baratas y por otra parte que nos protegen de un cambio climático catastrófico. Ese sería “el relato”. Y tengo que darle la razón a Recuenco en que efectivamente manda. Esto es impepinable. Pero yo creo que los incentivos también, entonces, ¿cómo podemos conciliar ambas ideas al mismo tiempo?
¿Sistemas complejos?
Durante un tiempo se me ocurrió que en sistemas complejos, donde es muy complicado comprender cuáles son tus incentivos porque es extraordinariamente difícil entender el coste de unas y otras opciones, la gente busca una explicación que le satisfaga y que le haga fácil la toma de decisiones así como posicionarse de un lado u otro.
Es decir, aceptar explicaciones tranquilizadoras tiene sentido cuando las otras no lo son o tienen un coste mental/emocional superior.
Por ejemplo, si yo creo que sino hago nada la vida en el planeta se va a acabar y que la forma de combatir esta catástrofe es volver a la edad media, pues está claro que haré todo lo que esté en mi mano para defender a capa y espada esta idea.
Esta idea la defienden algunos cracks y tienen un huevo de seguidores, luego hay que indagar sobre lo que consigue que esta gente llegue a esta alarmante conclusión y esta es parte de mi motivación con este post, es decir
¿cómo puede alguien ser tan burro?
Todas las narrativas, en vez de explicar™ bien aquello de lo que hablan, apelan a los sentimientos:
Sino hacemos nada contra el cambio climático la humanidad acabará catastróficamente (Oh no!)
Las renovables son una forma aparentemente indolora de hacer algo, en una visión superficial del asunto, porque no emiten nada mientras generan. Es decir, la idea de que no emiten es tranquilizadora frente a ver una gran fábrica echando humo.
Lo mismo ocurre con el coche eléctrico: a mi me vuelve muloko que las ciudades no estén contaminadas por el humo de los coches y en cambio me genera rechazo verlas con humo por el tubo de escape. Pero nadie sabe hasta que punto existe una relación con un cambio climático.
Los Palestinos son pobres aldeanos que viven de forma miserable, oprimidos por los poderosos Israelíes, luego debemos ponernos de su lado aunque decapiten bebés.
Sino ayudamos a los pobres con nuestros impuestos, dado que son unos perfectos inútiles sin nosotros, se extinguirán o sufrirán innecesariamente.
El Honorable e histórico Pueblo Catalán vive oprimido desde hace 800 años por el imperio invasor/opresor español. (los independentistas Catalanes han convertido el poder de la narrativa y las emociones (dar pena) en algo ya profesional, juegan en otra liga. Fíjate que su día nacional, la diada, es el recuerdo de una derrota!! es completamente surrealista!)
Las nucleares son peligrosísimas, (pero luego compruebas las muertes por tecnología y estas últimas son ridículas sobre todo si tenemos en cuenta la generación conseguida, luego dato mata relato).
Más…
Es decir, la cantidad de casos en los que se utilizan narrativas para "dar pena” es acojonante. No somos conscientes de cuánto nos debemos a nuestras emociones, cuantísimo mandan en nosotros y cuantísimo ciegan nuestro juicio.
Por ejemplo, el otro día un amigo muy sensato me decía respecto al cambio climático después de una mega loncha mía: “ok, quizás tengas razón, quizás haya motivos para dudar, pero un gobernante no se puede quedar parado de brazos cruzados mientras ve como el planeta se calienta!!”
y claro, yo me quedé pensando: “¿y por qué no?” eso es precisamente lo que debería hacer y, si por cualquier motivo eso terminase siendo un problema, habrá miles de empresas deseando venderte sistemas de refrigeración, aislamiento o billetes de avión y mudanzas a climas más fríos.
Y el motivo de que la gente opine que no nos podemos quedar de brazos cruzados, es en mi opinión, porque la emoción que uno siente de pensar que el planeta se va al carajo sino lo apoya es verdaderamente insoportable.
Pero es que además luego está el problema de que si a la suficiente cantidad de gente le da pena que el planeta se vaya al cuerno, hay un coste emocional adicional en llevarle la contraria a esa creciente mayoría!
Y si además el tema tiene cierta complejidad, entonces tenemos los dos costes anteriores:
Me da pena
Tengo que llevar la contraria a una creciente mayoría
y además
Si quiero llevar la contraria a una creciente mayoría y el tema tiene cierta complejidad, entonces tengo que además empollármelo lo suficientemente bien como para explicarlo, luego coste adicional → luego no lo hago
Por lo tanto mi conclusión es que mandan los incentivos. Otra cosa es que el relato/narrativa sea capaz de generar costes emocionales insoportables que pueden distorsionar esos incentivos en una u otra dirección.
En definitiva, esto es un intento por entender cómo nos manejan las narrativas y también por entender cómo los sentimientos identitarios manejan esas emociones con naturalidad.
Somos máquinas con millones de años de evolución en los que las emociones dictaban nuestro comportamiento y solo unos pocos cientos de miles de años en los que poco a poco el raciocinio es el que lo hace. Es mucho más fácil de lo que antes pensaba manejarnos con propaganda y narrativas
El “y tu más” no es más que un reflejo perfecto de que la inmensa mayoría de la gente dice lo que siente y no lo que piensa.
Muy buena reflexión, muchas gracias!