Aprendiendo a aprender
Me parece fascinante el proceso que está viviendo la sociedad de ser constantemente sometida a nuevas ideas. Aquí explico por qué me hace ser optimista sobre el futuro a largo plazo.
¿No te ocurre a veces que de repente comprendes algo tras un rato ensimismado y casi notas cómo se conectan dos neuronas entre sí? En mi caso lo más frecuente es que ocurra tras un rato pensando. Nunca ocurre mientras veo, leo o escucho. Siempre después. Necesito *macerarlo*. Por eso opino que leer está sobrevalorado. Lo verdaderamente *cañero* no es la lectura en sí, sino la capacidad que tenga el texto de transmitirte una nueva idea, de hacerte pensar, y de ahí extraer tu tus propias conclusiones.
Antes de internet con suerte podías exponerte a ideas nuevas en una tertulia con gente interesante, en un programa de TV pero sobre todo leyendo libros.
Eran tan pocos los puntos de vista verdaderamente diferentes antes de internet que se consideraba abierto de miras a aquel que leía el ABC y el país al mismo tiempo. Pero podías leerlos completamente ensimismado y no había manera alguna de recibir un estímulo. A la semana siguiente volvías a picar y el resultado era siempre el mismo. Me resultaban desquiciantes los periódicos de toda la vida. Me dejaban encefalograma plano.
La cuestión es que, al menos basándome en mi experiencia, cuando verdaderamente aprendes es cuando te sometes a tantos puntos de vista diferentes como sea posible.
El ABC y el país no tratan de defender posturas contrarias. Lo que hacían y siguen haciendo es defender la misma postura y difieren solo en quién debe ser el responsable del tinglado (si uno de derechas o uno de izquierdas). Es un debate identitario, una lucha de poder en realidad y por lo tanto las ideas y argumentos son irrelevantes.
A pesar de esto mucha gente sigue malgastando ingentes cantidades de energía en discutirlo y con especial énfasis en los medios de audiencias masivas. No me puede aburrir más.
Tu cabeza verdaderamente trabaja cuando se ve forzada a defender una postura y a entender bien otra contraria. En ese momento empiezas a fijarte en las aristas de una opinión y de la otra, a sacarle punta a cada una de las dos y vas conectando cosas hasta que, con suerte, consigues llegar a una conclusión. Vivir fuera una temporada tiene esa ventaja: no te deja otra alternativa que ponerte en los zapatos de otros si te quieres adaptar al nuevo entorno.
Luego está la otra parte que es, para conseguir recordarlo en tu cabeza, tratar de escribirlo, porque muchas veces consigues entender algo, pero no eres capaz de explicarlo.
Ahora estamos expuestos a ideas nuevas constantemente y desde que he abrazado esta experiencia online mi aprendizaje se ha acelerado.
En mi caso ha pasado con twitter.
El mayor aprendizaje de todos en twitter se produce de hecho, cuando te encuentras una discusión en la que no comprendes una postura ni la otra. Automáticamente tienes que destripar todos y cada uno de los tweets para tratar de ir añadiendo poco a poco una capa más de comprensión.
Seguramente de esta vez no te lo aprendas, pero notas como la siguiente vez la discusión no te resulta tan extraña.
Me ha permitido escapar de la transmisión de ideas con un solo punto de vista para someterme sin piedad a un tsunami de ellas.
Vuelvo a comentar el principio de Ray Dalio que tanto me gusta:
Be radically open minded
Ya he comentado en muchas ocasiones que en el nuevo aprendizaje, implica ser muy abierto con las nuevas ideas pero inmisericorde con el ruido.
Por ejemplo, con 20 años me regalaron una suscripción al Economist que devoraba sin piedad, pero llegó un momento años más tarde en el que determiné que yo había evolucionado y que sin embargo The Economist se había quedado estancado. Se había convertido en ruido.
Durante mis primeros años en twitter usaba esta red social para cosas absurdas como contar dónde había estado o qué había hecho.
Poco después recuerdo que empecé a compartir algunas ideas de lo que había aprendido tras leer mucho a Raymond Kurzweil, el transhumanismo, etc…
Empecé a seguir a diferentes cuentas buscando más información sobre este tema y de repente empecé a descubrir muy poco a poco otros puntos de vista y sin darme cuenta, buscaba cuentas que me hiciesen pensar en vez de como antes, cuentas que me contasen cosas. En otras palabras, lo que en otro artículo comentaba con la diferencia entre los contadores de historias (ruido) y los verdaderos buscadores de la verdad (señal): migré de los primeros a los segundos.
Neural link
No sé si va en serio o si es medio en coña pero Elon Musk, que no puede tener fama precisamente de no cumplir lo que promete, anunció hace no mucho su intención de desarrollar un implante que podría (en el futuro y en teoría) conectar tu cerebro a un ordenador y por lo tanto a internet y con ello a otros *cerebros*
Al margen de que sea ciencia ficción o no, con seguridad no estoy capacitado para evaluarlo, esto me hizo pensar que no lo necesitamos (de hecho sino es molestia prefiero seguir como estoy) porque creo que la experiencia que he descrito antes no es ni será exclusivamente mía.
Creo que poco a poco nos irá pasando a todos que esta constante exposición a nuevas ideas y nuevos puntos de vista nos hará converger en esta especie de red neuronal universal, e ir cada vez más prescindiendo del ruido y ser cada vez mejores en seleccionar la señal.
Va a ser un proceso largo porque el primer paso es la polarización que es la que estamos viviendo en la actualidad. Si antes había dos opiniones políticas y de repente hay millones, lo primero que tendrás serán millones de corrientes de opinión (polarización) pero creo que esta no es tanto resultado de que nuestras posiciones sean irreconciliables sino al hecho de que no estamos acostumbrados a enfrentar posiciones como ahora. No estamos ni diseñados ni entrenados para digerir tanta información luego en cuanto no nos gusta, en vez de abrazarla con apertura de miras, tendemos a rechazarla y la consecuencia es la polarización.
Creo por esto que lo que estamos viviendo es un proceso de educación masivo para aprender a enfrentarnos a nuevas ideas. En otras palabras, para muchos, como creo que lo ha sido para mí, creo que supondrá un aprender a aprender.